Uno de los accesorios que todos usamos cuando observamos es una linterna roja.
Aunque una vez adaptados a la oscuridad vemos lo suficiente como para percibir lo que nos rodea, la luz ambiental en condiciones de observación es insuficiente para ciertas cosas, como leer, consultar cartas, manipular con precisión objetos pequeños; así que lamentablemente necesitamos una fuente de luz extra.
Para esto se usan linternas rojas. Pero hay que tener en cuenta que, contrariamente a la opinión de algunos, la luz roja SÍ deslumbra…
Lo que pasa es que, a misma intensidad, una luz roja deslumbra MENOS que la luz blanca.
Esto es: una luz roja intensa deslumbra MÁS que una luz blanca tenue. Pero una luz roja deslumbra MENOS que una blanca DE LA MISMA INTENSIDAD.
Quiere esto decir que para mantener en la medida de lo posible la adaptación a la intensidad debemos:
1.- Usar una luz de la MENOR intensidad posible.
2.- Que esa luz sea roja.
Nótese que la mayoría de los frontales rojos que usan muchos aficionados son demasiado intensos (al menos, para usarlos en un cielo decente).
Y he aquí otro punto importante: la cantidad mínima de luz que necesitamos puede variar según la situación. Por eso es muy interesante que la intensidad de nuestra linterna sea regulable.
Respecto a qué linterna usar, podemos optar por modificar una comercial o comprar una específica.
Modificar una linterna comercial no es difícil. Si ya tiene LED rojo simplemente hay que ponerle alguna resistencia en serie para disminuir su intensidad. Si además ponemos un potenciómetro, ya tenemos una linterna de intensidad regulable. De ser necesario cambiar el LED blanco de una linterna comercial por uno rojo, esto también es fácil en muchos modelos.
Si no somos mañosos simplemente podemos taparla con algún tipo de plástico para que alumbre menos 🙂
Otra opción es comprar una linterna específica para astronomía. Hay varias opciones en el mercado.
Si decidimos comprar una linterna roja para su uso en astronomía, buscaremos que la intensidad de la luz se pueda regular de forma suave y gradual al mover el mando correspondiente. Otro factor de calidad en las linternas rojas es que deben iluminar de forma homogénea.
Este factor puede ser secundario si sólo vamos a leer o consultar cartas. Pero es un factor muy importante cuando usamos la linterna para iluminar el papel mientras dibujamos: una iluminación heterogénea dificultará la realización del dibujo, ya que veríamos unas parte más iluminadas que otras.
Algunas de las linternas usadas en astronomía usan dos LEDs. Se les llama “ojos de gato”.
En resumen, los criterios de calidad de una linterna roja regulable son:
1.- La variación de la intensidad de la luz cuando movemos el mando que la regula debe ser suave y gradual. Es muy común que cerca de la posición máxima del mando pero antes de llegar a la misma la intensidad de la luz “de un salto”. Tampoco es raro que la linterna se encienda con un “golpe” de intensidad.
2.- La iluminación debe ser homogénea, al menos si la usamos para dibujar.
Recientemente he podido comparar dos linternas rojas: la “Night Vision LED Flashlight” (NVLF) de Celestron y la “Starlite” de Rigel System:
Aquí podemos ver los “ojos de gato”, tanto apagados como encendidos:
La respuesta del mando de intensidad es claramente mejor en la Starlite, aunque en la NVLF tampoco está mal. Pero la diferencia de calidad se nota en la uniformidad de la iluminación, claramente mejor en la Starlite:
Para la NVLF:
Para la Startlite:
Espero que estas pequeñas notas puedan aportar algo para quien esté pensando en adquirir o construirse una linterna roja…
¡¡Cielos claros!!